Al abrir el paquete ya se ve que no estamos hablando de un espumador corriente y se ve a simple vista que es de una buena construcción. El tamaño es grandecito, para que os hagáis una idea de cómo quedará en la cocina, tiene un tamaño en altura similar a un rollo de papel de cocina de los normales y un poco menos ancho. Los otros modelos de 700 ml son unos 2/3 cm más altos. El nivel de ruido es mayor que otros dos que tengo, aunque tampoco es tan exagerado como he leído en algunos comentarios, vamos que no vais a despertar a nadie si le pones por la mañana en la cocina, quizás el pitido al ponerlo en marcha y al terminar, sin ser exagerado si pudiera ser un poco más bajo. En algunos comentarios ponen como un problema que la muesca de la rueda de selección no sea más visible, por ejemplo, pintándola en otro color, aunque tampoco es para tanto pues sólo hay tres posiciones: a la izquierda y a la derecha a tope (para espumar en frío y para chocolate) por lo que no se necesita ver ninguna muesca pintada, y al centro para calentar y espumar en caliente que es cierto que la muesca no se ve, pero cuando llega a su posición se nota un pequeño salto que no hace necesario más para saber que está en su sitio, si bien es cierto que estaría mejor si se viese la muesca. He visto algunos videos en que la jarra tiene una holgura importante al colocarla, pero no es mi caso, aunque si es cierto que podría estar mejor ajustada y eso evitaría que en algunas veces, cuando está funcionando vibre un poco, aunque la vibración desaparece moviendo un poco la jarra. No he probado a hacer chocolate, aunque por lo que he visto no hace el chocolate al que estamos acostumbrados, bien espesito, sino que más bien hace una leche chocolateada. Lo probaré algún día para mis nietos. En frio espuma muy bien, aunque sólo lo he utilizado una vez por probar que tal iba. En caliente la espuma es fina, densa y consistente y aguanta perfectamente para los capuchinos que hago, aunque sólo los suelo hacer para un familiar que le gustan con un poco de cacao en polvo puro por encima del café y un poco de canela por encima de la leche, y sin azúcar. Alguno he probado así y la verdad es que están francamente buenos. Fundamentalmente lo utilizo para calentar leche y puedo decir que la temperatura que alcanza es perfecta para mí, en torno a 60/65º. El nivel mínimo de leche indica que son unos 120 ml, aunque a veces echo menos (unos 100 ml) y no he tenido ningún problema. Al calentar hace un poco de espuma. Si al terminar y antes de echarla en el café, la mueves un poco para que leche y espuma se mezclen, queda una leche muy agradable, y si calientas a partir de unos 175 ml esa poca espuma que hace la mezclas bien con movimientos circulares con la misma jarra, y te queda una espuma semi líquida que casi te permite hacer latte art, aunque no es mi caso, mi habilidad es muy poca. En resumen, considero que es un muy buen espumador y que vale hasta el último euro gastado. Las comparaciones las hago con uno anterior que he tenido, de los normales, más pequeños, por la mitad de precio, con interior de teflón antiadherente que siempre se termina pegando la leche y con otro de marca conocida que viene con la cafetera de cápsulas. Se me olvidaba, la limpieza es cierto todo lo que dicen: terminas de usarlo, enjuagas un poco con agua, secas y arreglado. Yo un día a la semana echo un poco de agua con una gota de lavavajillas y lo pongo a funcionar y todo perfecto. Si la máquina no se avería y dura, merece la pena, y recomendaría su compra. Le he quitado una estrella por el detalle de la muesca, el pitido y porque la jarra debería encajar más ajustada.